De Castilla se conocen multitud de personajes históricos que han destacado en el arte de las letras, la guerra o la arquitectura. Los hay también que destacaron en el ámbito de las Ciencias naturales bien directamente bien sin buscarlo, como fue el caso de Gabriel de Castilla. Unos y otros han realizado grandes contribuciones al saber universal bajo la sombra del poder y reconocimiento que ha tenido Castilla en el devenir de los siglos. A Gabriel de Castilla en concreto se le atribuye el descubrimiento de la Antártida, el continente sobre el que se encuentra el Polo Sur.
Navegante, explorador y militar español, Gabriel de Castilla nació hacia el año 1577 en la ciudad de Palencia, siendo hijo de Alonso de Castilla y Cárdenas (descendiente de don Pedro I de Castilla) y de Leonor de la Mata. Inició muy pronto su carrera militar y se incorporó al servicio de la Nueva España como capitán de artillería. En 1589 y por deseo del Virrey don García Hurtado de Mendoza partió a bordo del San Francisco en compañía de Hernando Lamero y Gallego de Andrade con el propósito de explorar el territorio de Chile. En 1596 y pese a su juventud fue nombrado general del Callao por el Virrey del Perú, su primo hermano don Luis de Velasco. Poco después trasladó un contigente de 215 soldado en ayuda del gobernador Martín García Oñez de Loyola, en serias dificultades durante la guerra de Arauco. Como recompensa, éste le nombró su maestre de campo, lo que le obligó a luchar contra los indígenas y construir diversas fortificaciones como la de San Salvador de Coya. En su labor de vigilancia y defensa de la costa chilena tuvo que enfrentarse además a numerosos piratas y corsarios, esencialmente de origen holandés.
Tras la desaparición en el mar de Juan de Velasco de Barrio, sobrino del virrey, y después de haber sido acusado a la Inquisición de se sabe qué cargos (apenas quedan referencia a este capítulo en los documentos históricos) Gabriel de Castilla asumió el cargo de máxima autoridad dentro de la Armada del Sur y encabezó la misión principal de proteger las costas de Chile frente a los ataques extranjeros. Así, zarpó en el año 1603 de Valparaíso rumbo al sur con tres navíos: Jesús María, Nuestra Señora de la Visitación, buque que había sido del corsario Sir Richard Hawkins, y Nuestra Señora de las Mercedes. En esta travesía, y durante una fuerte tormenta, la expedición de Castilla alcanzó los 64º de latitud Sur, tras lo cual consiguieron regresar a su lugar de partida. El hecho de haber alcanzado dicha posición a principios del siglo XVII le ha convertido en el potencial descubridor de las tierras antárticas, pues aunque ese hallazgo no se encuentra documentado, el marinero holandés Laurenz Claesz declaró
"(...) haber navegado bajo el Almirante don Gabriel de Castilla con tres barcos a lo largo de las costas de Chile hacia Valparaiso, i desde allí hacia el estrecho, en el año de 1603; i estuvo en marzo en los 64 grados i alli tuvieron mucha nieve. En el siguiente mes de abril regresaron de nuevo a los costas de Chile."
En el año 1605 Gabriel de Castilla se casó con Genoveva de Espinosa y Lugo de Villasante en Lima, con la que tuvo un total de seis hijos. La fecha y el lugar de fallecimiento del general Castilla e desconocen si bien los historiadores fechan su muerte en la década de 1620.
La latitud de los 64 grados no fue sobrepasada hasta el año 1773, casi dos siglos después, por el famoso navegante Jame Cook. En reconocimiento al avistamiento y la valentía de Gabriel de Castilla la base antártica española emplazada en la isla Decepción lleva en la actualidad el nombre de Gabriel de Castilla.
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